Con todo, son sólo una pequeña muestra de la amplia gama de productos que despliega esta feria de oportunidades, abierta también a la bisutería, la cosmética, complementos, decoración y textil del hogar, regalos, juguetería, librería, informática,
Más modesta será la presencia de animales, artículos esotéricos, joyería, charcutería, colchonería, cuchillería, iluminación, herboristería o numismática, con un mostrador cada uno.
Otros servicios
Al margen del mero escaparate comercial, una decena de carpas se abrirán con afán de promoción y servicio. Se trata de los espacios destinados a probadores, información (atendido por la Unión de Consumidores de La Rioja), Internet (Fundarco), a la Fundación Logroño Turismo y a la ludoteca, esta última de carácter gratuito para atender a pequeños de entre 3 y 12 años, y cuya capacidad se amplía este año para cien niños.
Como novedad figura la carpa que se instalará tras el Consistorio para uso de los propios comerciantes (con servicios, máquinas dispensadoras, mesas y sillas), así como el área ocio-lúdica prevista en el paseo de Dax. Allí, los niños mayores de tres años podrán disfrutar de un castillo hinchable y de un circuito de quads.
Y como complemento a todo ello, 20.000 bolsas con el logotipo de ‘Logrostock’ para portar las compras realizadas en esta feria.
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